Hace cuatro años, el 7 de septiembre, El Salvador inició un experimento financiero sin precedentes al incorporar Bitcoin en su sistema de moneda de curso legal. En este aniversario trascendental, el presidente Bukele anunció que el país había vuelto a adquirir 21 monedas de Bitcoin, una cifra que hace eco del límite total de 21 millones de Bitcoin. Esta acción llevó la tenencia de Bitcoin del país a más de 6,300 monedas, que al valor de mercado actual supera los 700 millones de dólares, consolidando aún más su posición como "el mayor tenedor soberano de Bitcoin en el mundo".
Este experimento de criptomonedas liderado por el Estado, a primera vista parece una estrategia de inversión, pero en realidad es una importante decisión política relacionada con la reconfiguración de la soberanía financiera. Desde la implementación de la estrategia de "comprar 1 Bitcoin diariamente" en marzo de 2023, El Salvador no ha cesado su inversión en el mercado de Bitcoin. Incluso ante una caída de más del 60% en el precio de Bitcoin en 2022, y a pesar de la presión del Fondo Monetario Internacional (FMI) y las dudas de la comunidad internacional, el país se ha mantenido firme en su política establecida.
Hasta agosto de 2025, El Salvador ha adoptado una estrategia de gestión descentralizada de reservas, almacenando Bitcoin de manera distribuida en 14 direcciones, cada una con un saldo no superior a 500 monedas, esta práctica tiene como objetivo hacer frente a posibles amenazas de la computación cuántica. Este enfoque profesional de gestión de activos no solo demuestra la capacidad profesional del país en el ámbito de los activos digitales, sino que también resalta su firme determinación de mantener Bitcoin a largo plazo.
El presidente Bukele considera que Bitcoin es una herramienta clave para liberarse del dominio del dólar y mejorar la inclusión financiera. Para un país como El Salvador, que recibe más de 10 mil millones de dólares en remesas al año y donde las tarifas de remesas internacionales pueden alcanzar el 10%, se había depositado grandes esperanzas en las características de bajo costo de Bitcoin. Sin embargo, la realidad no ha sido tan alentadora. Los datos del primer trimestre de 2025 muestran que las remesas en criptomonedas solo representan el 0.52% del total de remesas, lo que supone una gran discrepancia con las expectativas.
A pesar de los numerosos desafíos, el experimento de Bitcoin en El Salvador continúa. Esta exploración de criptomonedas impulsada por el Estado no solo es una innovación financiera, sino también un audaz intento de redefinir la soberanía financiera del país. Con el tiempo, los efectos y el impacto a largo plazo de esta política comenzarán a hacerse evidentes, lo que merece la atención continua de la comunidad financiera global.
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NFTArchaeologist
· Hace44m
¡Alcista! Cantar en contra de todos finalmente dio resultado.
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ILCollector
· 09-08 08:53
Qué pérdida... A este ritmo, si seguimos acumulando, la tesorería de El Salvador va a To the moon.
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RugPullAlarm
· 09-08 08:52
Dividir fondos en múltiples DIRECCIONES es una señal de shorting. Observa.
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ProposalManiac
· 09-08 08:39
Lo que dices sobre el porcentaje de remesas es similar a las probabilidades de éxito de los tontos en el pico.
Hace cuatro años, el 7 de septiembre, El Salvador inició un experimento financiero sin precedentes al incorporar Bitcoin en su sistema de moneda de curso legal. En este aniversario trascendental, el presidente Bukele anunció que el país había vuelto a adquirir 21 monedas de Bitcoin, una cifra que hace eco del límite total de 21 millones de Bitcoin. Esta acción llevó la tenencia de Bitcoin del país a más de 6,300 monedas, que al valor de mercado actual supera los 700 millones de dólares, consolidando aún más su posición como "el mayor tenedor soberano de Bitcoin en el mundo".
Este experimento de criptomonedas liderado por el Estado, a primera vista parece una estrategia de inversión, pero en realidad es una importante decisión política relacionada con la reconfiguración de la soberanía financiera. Desde la implementación de la estrategia de "comprar 1 Bitcoin diariamente" en marzo de 2023, El Salvador no ha cesado su inversión en el mercado de Bitcoin. Incluso ante una caída de más del 60% en el precio de Bitcoin en 2022, y a pesar de la presión del Fondo Monetario Internacional (FMI) y las dudas de la comunidad internacional, el país se ha mantenido firme en su política establecida.
Hasta agosto de 2025, El Salvador ha adoptado una estrategia de gestión descentralizada de reservas, almacenando Bitcoin de manera distribuida en 14 direcciones, cada una con un saldo no superior a 500 monedas, esta práctica tiene como objetivo hacer frente a posibles amenazas de la computación cuántica. Este enfoque profesional de gestión de activos no solo demuestra la capacidad profesional del país en el ámbito de los activos digitales, sino que también resalta su firme determinación de mantener Bitcoin a largo plazo.
El presidente Bukele considera que Bitcoin es una herramienta clave para liberarse del dominio del dólar y mejorar la inclusión financiera. Para un país como El Salvador, que recibe más de 10 mil millones de dólares en remesas al año y donde las tarifas de remesas internacionales pueden alcanzar el 10%, se había depositado grandes esperanzas en las características de bajo costo de Bitcoin. Sin embargo, la realidad no ha sido tan alentadora. Los datos del primer trimestre de 2025 muestran que las remesas en criptomonedas solo representan el 0.52% del total de remesas, lo que supone una gran discrepancia con las expectativas.
A pesar de los numerosos desafíos, el experimento de Bitcoin en El Salvador continúa. Esta exploración de criptomonedas impulsada por el Estado no solo es una innovación financiera, sino también un audaz intento de redefinir la soberanía financiera del país. Con el tiempo, los efectos y el impacto a largo plazo de esta política comenzarán a hacerse evidentes, lo que merece la atención continua de la comunidad financiera global.